martes, 31 de diciembre de 2013

Hasta siempre 2013

Último día del año y última entrada en el blog. Este año, a diferencia de los anteriores, no voy a hacer una recopilación de los mejores momentos o de las personas más importantes de mi vida. Eso queda en mi pensamientos y, sobre todo en mi corazón; y esas personas saben quiénes son y lo que hacen cada día por mí.

Se termina un año impar, un año que para muchos será difícil de olvidar, por desgracia, por sus aspectos negativos. Muchos pronosticaban la mala suerte que acarrea esta cifra: que si martes 13, que si los americanos no tienen planta 13 en sus edificios…y los que no creemos en ese tipo de supersticiones comenzamos el año con la ilusión y la esperanza habituales. Sin embargo, y una vez pasados estos nueve meses, me temo que ha sido un año poco afortunado para el mundo. Un año en el que cada día nuevas familias se ven inmersas en la pobreza, en el que las libertades y los derechos se ven cada vez más reducidos o en el que el mundo se vuelve  más y más loco. No recuerdo un solo día de este año en el que las noticias positivas hayan superado a las negativas. Todo ha girado en torno a guerras, atentados, violencia, lucha y odio por ser diferentes, represión, recortes, sufrimiento en las familias, etc. Y no es precisamente la mala suerte lo que lleva a esta situación. Es el ser humano el que lo provoca y, por ello, mi mayor deseo para el 2014 es que la razón vuelva a un mundo que ha perdido el rumbo.

Para mí, este año se base en el contraste y en sentimientos enfrentados. En momentos buenos que vienen acompañados de otros no tan agradables y en encuentros de personas, pero en distanciamiento y pérdida de otras. Un contraste en blanco y negro, con pocos toques de color y luminosidad. Sin embargo, la belleza de una foto en blanco y negro se encuentra en el tiempo transcurrido o en la gran cantidad de historias que esconde tras de sí. Eso ha sido el 2013. Una foto en blanco y negro que siempre recordaré por las historias que esconde que tanto me han hecho aprender.
Porque sí, en este año he aprendido muchas cosas. He comprendido que conforme pasa el tiempo los caminos se definen cada vez más y los obstáculos y desniveles alejan a muchas personas de tu vida. Incluso muchos de aquellos caminos que creías inseparables se distancian y crean un puente tan largo que difícilmente os volverá a unir. He aprendido también que la fortaleza no reside en saber reír ante los problemas sino que es mejor una lágrima a tiempo que una sonrisa que esconde sufrimiento. Incluso es mejor equivocarte una y otra vez sabiendo lo que estás haciendo a no intentarlo y actuar haciendo siempre lo correcto.
Este año me ha enseñado que el amor es complicado y nosotros lo complicamos aún más. Que hay muchas formas de querer y no siempre queremos como debemos hacerlo. Incluso que el tiempo determina nuestra vida y hay que saber en qué momento nos encontramos.
 Sin ninguna duda, lo más importante del 2013 ha sido que en ese aprendizaje he estado rodeada de grandes personas. Son ellos los que han aportado la felicidad en este año y por los que brindo para que el próximo año sigan a mi lado de la forma en que lo hacen.

Recuero que el año pasado felicité el año a muchos de mis amigos con el deseo de que busquen y encuentren la felicidad. Ahora me cuestiono si es el mejor mensaje que les pude decir porque, ¿tenemos que vivir buscando la felicidad? En estos meses he pensado mucho en la felicidad, incluso más de lo que debería, y ahora creo que cuanto más nos empeñamos en conseguir la felicidad más nos alejamos de ella. De hecho, nadie sabe donde está exactamente. No me gusta tener que vivir cada día buscando algo que ya tengo. He llegado a la conclusión de que en la propia tristeza está la felicidad pero nos empeñamos en hacer todo perfecto y nos olvidamos de vivir. Por eso no pido un año perfecto; deseo un año que me siga enseñando como vivir cada situación, ya sea buena o mala, sin pensar en ser feliz y siéndolo directamente.


Para el 2014 me centraré en una gran frase del fallecido Nelson Mandela: “Siempre parece imposible hasta que se hace”. Con ella me quedo y con estas palabras voy a empezar un año con ilusión y ganas de seguir afrontando nuevas situaciones, conociendo personas increíbles y disfrutando de cada segundo que la vida me regala.


viernes, 23 de agosto de 2013

No verano

Hace algunos meses ya que los más agoreros pronosticaban un “no verano”. A las temperaturas se referían los meteorólogos que, por otro lado, no han salido muy bien parados con sus pronósticos. Yo, sin embargo, prefiero conectar ese “no verano” con todas aquellas personas para las que estos meses siguen consistiendo en luchar por sobrevivir día a día.

Pero el “no verano” no se puede aplicar a los políticos. Ellos, haciendo gala de su privilegiada suerte, tuvieron la cara dura de asistir a un pleno parlamentario con las maletas. Vergonzoso, irrespetuoso e indignante a más no poder.  Parece que los millones de parados, la pobreza infantil, la corrupción o las estafas no son suficiente motivo para que los que deben dirigir el país decidan centrarse en ello. Ingenua, eso es lo que soy, cuando pensé que este año Gobierno y políticos renunciarían a su período vacacional dadas las circunstancias. ¡Qué osadía la mía!

Siguiendo con el verano, no han sido días de descanso para las malas noticias. Hoy mismo se hacía pública una de las más tristes cifras que he oído en mucho tiempo: más de un millón de niños sirios se han visto obligados a escapara y vivir como refugiados. De ellos, más de la mitad tienen menos de 11 años y se exponen a peligros como la prostitución o cualquier tipo de explotación. Mientras tanto, la comunidad internacional parece que hace oídos sordos y los propósitos se quedan en meras palabras. En este mundo de capitalismo salvaje cualquier interés se antepone a las vidas humanas.
Aprovechando este tema, alucinando me quedé cuando la ONU y la UE decidieron convocar un viernes una reunión “URGENTE” para el siguiente lunes. El tema: la inminencia de una guerra civil en Egipto. Menos mal que era urgente…aunque para las pocas decisiones y la falta de iniciativa que reinan en estas organizaciones lo mismo daba.
Siria o Egipto son claros ejemplos de que es necesario un cambio y de que el mundo no puede cerrar los ojos y seguir luchando por los intereses individuales de unos pocos.

Y en España un verano movidito gracias al personaje del año: Luis Bárcenas. Emprendedor y  un hombre de negocios es como se define él. Otros calificativos serían más adecuados, pero de momento podemos afirmar que ha pasado sus vacaciones y su cumpleaños es una fantástica residencia veraniega: la mismísima prisión de Soto del Real. Veremos como acaba todo esta asunto aunque mucho me temo que el pacto Rajoy-Bárcenas es cada día más real, sin olvidarse de quienes están al frente del Ministerio de Justicia.

Pero si algo me ha cabreado este verano ha sido la mentira. La falta a la verdad de nuestro presidente del Gobierno. Mariano se presentó ante el Congreso y, por tanto, ante la representación del pueblo español, dispuesto a justificar su papel en el caso Bárcenas. No obstante, nos regaló una mentira que le ha dejado con el culo al aire (si no lo tenía ya desde hace mucho). Algo bochornoso y ante lo que no deberíamos hacer la vista gorda. Se trata de algo muy grave que debería estar penado, por lo que la propuesta de una ley que regule la mentira en sede parlamentaria es de las mejores ideas que se han propuesto en los últimos meses. Una pena, sin embargo, tener que llegar a ese extremo.
Parece que los problemas se acumulan para Rajoy y los próximos meses serán decisivos para su continuación al frente del Gobierno.


Este ha sido el verano político y social. Pero no puedo dejar de mencionar el terrible accidente de Santiago. Sus familias y amigos cuentan con el apoyo de toda la sociedad.

miércoles, 17 de julio de 2013

Gran Circo Político España


Un circo es lo que tenemos como gobernantes. Cada uno con su papel, alguno más divertido que otro (no olvidemos la “gracia” de Mato frente a la chulería de Montoro), pero todos ellos actuando en el Gran Circo Político España. Un espectáculo que va más allá de nuestras fronteras y que se ha hecho famoso en el mundo entero. No será por su calidad, ni mucho menos. Dejemos su éxito en manos de la falta de vergüenza y el ridículo desmesurado.

Si llevamos meses asistiendo a funciones cuanto menos entretenidas, esta semana ha tenido lugar una actuación especial protagonizada por el mismísimo Presidente. En un escenario caracterizado por la crisis económica y el malestar de la sociedad, nuestro Mariano ha vuelto a ponerse una vez más su traje de payaso, su enorme nariz roja que cada día se alarga más como la de aquel divertido dibujo animado y un maquillaje que oculta todo tipo de carisma.

Emocionada ante tal actuación, sorprendida me quedé cuando Rajoy decidió dar comienzo al show. Nadie me había avisado de que sería mudo en su mayor parte o como mucho el protagonista recurriría a un guión bien diseñado pero falto de credibilidad. Es lo que pasa cuando se deja todo tan bien calculado, puesto que ya no es solo el caso Bárcenas, sino que se pasa a cuestionar la calidad de nuestro payaso protagonista. Un poquito de improvisación no vendría nada mal.

No obstante, lo que sí consiguió el gran Mariano fue hacernos reír. Del “Todo es falso menos alguna cosa” pasamos al “No me someteré a chantaje”. Parece, o me gustaría pensar, que va a dejar de reírse de los españoles y esta vez vamos a ser nosotros los que le dejemos en calzones y más rojo que el logo de la oposición. Algo que deberíamos hacer pero que, como han señalado periódicos extranjeros, no se hace: España vuelve hacer gala de su talante frente a la corrupción. Mociones de censura, justicia…todo eso está muy bien, pero la presión del pueblo es, sin duda, la mayor de las armas para tener una democracia de verdad.
El Gran Circo Político España nos sorprende cada día con nuevas funciones. La última tan comprometida y ridícula que solo debe tener un desenlace: el despido de sus trabajadores y el cierre de sus puertas.

viernes, 21 de junio de 2013

Espiral del silencio

Una mañana como cualquier otra, un desayuno corriente, una ducha caliente y el mismo cuento de todos los días. Maquillarse una sonrisa, peinarse con una trenza de felicidad y vestirse de la persona que antes era. Al principio resultaba difícil pero poco a poco se convierte en rutina. Saludaba y fingía que nada pasaba, reía con cada una de sus bromas y decía todo aquello que sabía que era lo apropiado. Una espiral del silencio. 

Así vivía cada uno de sus días, sin pensar en lo que había sido, por lo que la habían querido y que ya había quedado atrás. Había cambiado y no podía volver al pasado pues había olvidado llevarse consigo la alegría de aquellos días. Él se la llevó consigo y ella no se atrevía a pedírsela. Quería recuperar su felicidad, volver a sentir ilusión en su interior y sentirse especial y llena de fuerza ante el futuro. Algo que parece fácil se hacía imposible para ella. Se creía fuerte pero su debilidad se manifestó como nunca lo había hecho. Se dejó atrapar por la espiral de la incredulidad, la impotencia y la inferioridad. Una espiral del silencio.

Y es así pasaban los meses. Feliz por fuera pero vacía por dentro. Él, sin quererlo, se llevó lo tanto significaba para ella. Se apoderó de su ilusión y de su esperanza en los dos, de aquello por lo que tanto había luchado y en lo que tantas noches había soñado. Se hizo dueño de imágenes juntos, de momentos de complicidad y de sonrisas que escapan al viento. Se olvidó de lo que habían sido y de todo aquello que habían compartido. Egoísmo o realismo, según se mire, tuvo una consecuencia irreparable sobre ella. Vivía en una espiral del silencio.

Siempre se había prometido luchar, aguantar lo que fuera necesario y conseguirlo. Rendirse ahora significaba la mayor derrota que se puede imaginar. No quería sentirse más pequeña y perdedora ni alejarse más de lo que siempre se había prometido ser. Pero tan pequeña frente a él, tan dependiente y sin nada que decir. No sabía cómo expresar lo que su cabeza exigía sino que se empeñaba en actuar como su corazón mandaba. Un corazón encarcelado preso de la espiral del silencio.

Una espiral que no la dejaba vivir como siempre lo había hecho. Un silencio que la atormentaba, gritaba sin que nadie la escuchara ni acudiera a rescatarla. El mundo seguía girando como si nada y ella seguía presa de aquel silencio que cada día la hacía más pequeña.

Luchar por las llaves de esa prisión, sentir el aroma de la libertad y correr persiguiendo un nuevo sueño. Empaparse de risas sinceras, retar a los temores y ganar en fortaleza. Vencer una espiral del silencio.

Injusticias en la justicia

Cada día asistimos a nuevos casos de corrupción, nuevas imputaciones, nuevos personales implicados...Sin embargo, no nos planteamos cuantos de esos casos son realmente objeto de una democrática justicia.
No solo nuestra Constitución, sino que la propia Declaración Universal de los Derechos Humanos defiende el derecho a la igualdad ante la injusticia. Pero qué más da si vivimos en un país en el que el poderoso siempre contará con una ayuda ajena, un "amiguito" o una fuente de presión política, económica o incluso religiosa que le librará de cualquier tipo de problema. Si pensamos que todos somos iguales ante la justicia estamos muy equivocados. Si robas un móvil no dudes en tu imputación inmediata y tu posterior sentencia, sin olvidar una fianza imposible de afrontar. Deja los móviles y pásate a millones de dólares, quizá así hasta te libres de la imputación. Y si no es así, siempre recibirás una ayuda que te libre de la cárcel o de la propia sentencia.

Vergonzoso es que una persona como Blesa esté en la calle. Vergonzoso que no vaya a responder nunca por lo que es responsable. Vergonzoso que un juez no pueda trabajar como fruto de las presiones. Vergonzoso, al fin y al cabo, cómo se hacen muchas cosas en este país.
Y si no estáis de acuerdo conmigo, ¿por qué la Infanta no está imputada? No digo que sea culpable o deje de serlo, pero cualquier ciudadano que estuviera asociado a un caso como el tratado hubiera sido inmediatamente llamado a declarar simplemente para defender su inculpabilidad. ¿Por qué se tacha de "loco" a un juez que trata de ir a por un banquero cuando lleva más de veinte años con un trabajo impecable en la justicia? ¿Por qué lo que debería ser un poder independiente está cada vez más contaminado?

Justicia, injustica, culpabilidad, inocencia...qué más da. Aquí solo sirve una cosa: dinero, poder e influencia. La impunidad va asociado a ello en España mientras que no exista una auténtica independencia y una democracia plena e igual para todos.

sábado, 8 de junio de 2013

Una feria cordobesa

La semana pasada se resume en fiesta y celebración para el pueblo cordobés. Entre trajes, caballos, rebujitos y sevillanas, Córdoba fue testigo de su semana mágica, la semana de la alegría, la diversión y el orgullo andaluces. Eso es lo que se sentía al pasear entre las casetas o al ver la cara de entusiasmo de aquellos afortunados que paseaban en galantes carrozas de caballos.


Una feria que tuvo lugar en una de las ciudades más bonitas de España. Una ciudad de encanto, arte, belleza y vitalidad en la que cada rincón esconde un sinfín de historia. Por ello, os propongo en este blog un día perfecto para que el año que viene lo llevéis a la práctica en la Feria de Córdoba de cada mes de mayo.

Para comenzar el día un paseo por las preciosas calles cordobesas. Así descubrirás preciosos y blancos patios andaluces coloreados con flores, pequeñas y estrechas calles llenas de encanto e incluso antiguas ruinas que esconden miles de años de historia en sus capiteles y fustes en medio de una plaza. Y cuando el encanto cordobés ya te haya conmovido llegarás a la judería. Una zona imprescindible para cualquier día en la que te perderás por sus calles atraído por la belleza de cada edificio, de cada patio, de cada bonito restaurante... No olvides hacerte unas fotografías para dar envidia de la belleza de este bonito barrio cordobés y después disfruta de un salmorejo acompañado de un refrescante tinto de verano en una terraza dentro de un patio andaluz. Come rodeado por el sonido del agua de las fuentes, el reconfortante aroma de las flores y la belleza de los mosaicos árabes. Es el momento de darte un respiro tras una mañana andando bajo el calor de esta bella ciudad.



Pero esto no es todo, porque después de disfrutar de una buena comida andaluza es el momento de disfrutar del corazón de Córdoba: su mezquita. Una obra de arte impresionante que te dejará sin palabras desde el momento en que entras en ella. Desde el Patio de los Naranjos hasta su Cúpula mozárabe, esta obra arquitectónica no deja lugar para la indiferencia. Una oportunidad para descubrir la grandiosidad del arte islámico con su perfecta simbiosis de equilibrio, simetría y armonía. Una mezquita construida a partir de muestras visigodas y romanas en la que la mezcla de estilos es evidente sobre todo desde su paso a la cristiandad. Belleza en toda regla.



Tras esta obligada visita en la que debes aprovechar para refrescar tu cuerpo a la sobra de los arcos y columnas islámicas, es el momento de atravesar el puente romano para disfrutar de la postal cordobesa por excelencia. Unas vistas preciosas que redondearán un día de turismo que siempre guardarás en la memoria.



Y llega el momento de descubrir una feria llena de encanto. Las típicas atracciones no pueden faltar, al igual que los numerosos puestos de comida, pero no son capaces de quitar el protagonismo al encanto de la feria cordobesa: las casetas, los vestidos de gitana, los caballos andaluces y los rebujitos y sevillanas que acompañan durante todo el día.
Una deslumbrante puerta de entrada llena de bombillas preside el recinto, si bien la crisis económica ha disminuido las proporciones de la misma. Una buena oportunidad para realizar una bonita fotografía.
Recorre muchas casetas aprovechando su carácter público, baila sevillanas, conoce el encanto y la amabilidad de la gente cordobesa, refréscate con un buen rebujito. Disfruta de la belleza de los caballos, de la elegancia de las carrozas tan bien decoradas o de los trajes cordobeses.




Una experiencia única que no dudarás en repetir.
Hasta el próximo año Feria de Córdoba.

miércoles, 29 de mayo de 2013

Bancos, unos gigantes

En mi post de hoy voy a analizar un tema tratado por el economista Simon Johnson en su artículo “Algunas de estas instituciones se han convertido en demasiado grandes”, publicado en el blog The Baseline Scenario, lecturas imprescindibles para entender la realidad económica y cuyo enlace os dejo a continuación: http://baselinescenario.com/

En dicho artículo del 7 de marco de 2013, Jonhson cuestiona el enorme tamaño de ciertas instituciones como las bancarias que, en muchos casos, gozan de tanto poder que se hace imposible enjuiciarlas. Señala que estas enormes instituciones se imponen al propio poder político y afirma: “son tan grandes que originan graves problemas, un tamaño que no debería entorpecer su sentencia de prisión”.
 Johnson afirma en el artículo que existen senadores norteamericanos que tratan de convertir grandes bancos en instituciones más pequeñas. De hecho, acusa a la Junta de Gobernadores de la Reserva Federal de no hacer nada puesto que los defensores de los grandes bancos mundiales consideran que sus repercusiones son tan grandes que resulta muy difícil e incluso imposible reducir su poder. El economista concluye que esto sería un enorme error y que Obama y su gobierno deben seguir luchando por la reducción del poder de las enormes instituciones, sobre todo las bancarias.

Me ha sorprendido mucho un aspecto que refleja el autor. Thomas Jefferson afirmó: “El más sagrado de los deberes del gobierno es impartir justicia igual e imparcial para todos sus ciudadanos”. Pero, sorprendentemente, un fiscal declaró al Congreso y al país que ese principio no se puede aplicar a una entidad financiera muy grande. Doble moralidad en todo caso extendido al ámbito democrático, un problema realmente grave.


Me impresiona esta última afirmación puesto que considero que es la prueba más evidente del poder del sistema financiero. Opino como Jonhson en que Obama y todos los dirigentes políticos deben tratar de reducir el tamaño de estas instituciones puesto que llega un momento en que resultan incontrolables. En la actualidad, muchas instituciones bancarias y financieras han alcanzado tanto poder y expansión que sus acciones resultan difíciles de enjuiciar. Se les ponen multas en ocasiones, pero habría que pensar en otro tipo de sanciones puesto que el dinero, para una institución de ese tamaño, no es problema alguno. Por lo tanto, bajo mi punto de vista, los bancos grandes deberían dejar de ser tan grandes para que no gocen del poder que detentan actualmente. Un poder que llega a las esferas políticas y que impide que los gobernantes actúen conforme a las necesidades de la población. Pero un poder que incluso llega al ámbito judicial y, cuyo ejemplo se puede ver en este articulo con la prueba que aporta Simon Johnson: un fiscal que considera no aplicable a las grandes instituciones financieras el deber principal de todo presidente.

martes, 28 de mayo de 2013

Bermúdez, la entrevista a un juez

El domingo pasado el programa de la Sexta, Salvados, mostró otra genial entrevista de la mano de Jordi Évole. En esta ocasión, el entrevistado fue Javier Gómez Bermúdez, juez español de renombre de la Audiencia Nacional desde 1999. Jueces hay muchos pero, en este caso, el juez Bermúdez ha sido objeto mediático en diversas ocasiones sobre todo por juicios como el del 11-M o por los ataques políticos a los que se ha visto sometido. El programa, aunque se presentaba como una crítica a la transparencia de la justicia, lo cierto es que acabó centrándose principalmente en la persona de Bérmudez. Interesante, cuanto menos, la entrevista y el juez.  

  ¿Quién es Bermúdez?


El 3 de agosto de 1962 nacía en Álora (Málaga)Salvador Francisco Javier Gómez Bermúdez, un hombre que llegaría a presidente de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional como un valiente guerrero en la lucha contra el terrorismo. Apasionado al derecho, se licenció en dicha rama en la Universidad de Granada y, con tan solo 25 años, ya era juez. Una muestra de su talento, de una pasión por la ley que heredó de su propia familia. 
 Su carrera ha sido larga, intensa y exitosa. Desde juez de un pequeño pueblo malagueño, miembro de la Asociación Profesional de la Magistratura o profesor de la Universidad Europea de Madrid, hasta presidente de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional. No obstante, un juez sometido a presiones, muy cuestionado en ciertas ocasiones e incluso señalado directamente por ciertos partidos políticos. Cuando en 2004 accedió al último cargo mencionado, la tensión se dejó ver e, incluso, se revisó su proceso de nombramiento hasta en cuatro ocasiones. Pero nada pudo con este juez y desempeñó dicha labor hasta que en 2012 fue sustituido por Fernando Grande-Marlaska, convirtiéndose en miembro del Juzgado Central de Instrucción Número 3 de la misma Audiencia Nacional. 

 Como he señalado anteriormente, Bermúdez ha destacado por su papel contra el terrorismo. Ya desde pequeño y, como señala él mismo, “era el intelectual de la pandilla”. Un hombre inteligente, serio y firme, como dejó ver en la entrevista de Évole, cuyo carácter le ha impulsado y le ha permitido conseguir excelentes resultados en su carrera judicial. Y en dicha carrera el terrorismo ha sido su enemigo principal, siendo el macrojuicio del 11-M su experiencia más enriquecedora. Y así lo señalaba el juez en el programa cuando se le preguntó por su juicio más importante. De hecho, y pese a las críticas de “Iluminados” que siguen viendo agua donde hay un desierto y dudas por el acierto de la sentencia, Bermúdez se mantiene firme en el resultado del juicio más importante de la historia de España a nivel de terrorismo. No olvidando tampoco, como señalaba en la entrevista, que un trabajo tan importante no es objeto de una única persona y fueron muchas las personas, como el juez Guevara, los que participaron en la sentencia. Por lo tanto, y en relación a dicho juicio, sería mejor escuchar más a menudo a hombres como el juez que se basa en la prueba y en la racionalidad, y escapar del populismo y la charlatanería de ciertos “personajes” que solo buscan el desprestigio y el enturbiamiento de la verdad. 
Pero el 11-M no fue su primera experiencia en grandes juicios antiterrositas. El juez dirigió la vista del 11-S contra la célula española de Al Qaeda, decenas de procedimientos contra el terrorismo islamista así como sentencias contra miembros de ETA, por el asesinato de los concejales del PP Gregorio Ordóñez y Miguel Ángel Blanco y el atentado contra el socialista Eduardo Madina. Y, ahora que se cumple el décimo aniversario, no hay que olvidar su papel como juez en el caso del Yak-42. 

 Una persona intelectual, autor del ensayo No destruirán nuestra libertad y promotor de la conocida “Doctrina Parot”. Doctrina que defendió fielmente en Salvados definiéndola como “lo más justo para una persona que ha cometido treinta delitos”. Y, hablando de defensa, Jordi Évole consiguió la declaración que muchos esperábamos: el guante hacia el juez Garzón. Una vez más, Bermúdez dio muestras de su legalidad y profesionalidad cuando consideró la sentencia a Garzón como justa pero necesaria de un indulto, algo que no entiende como no ha ocurrido. La prueba de la racionalidad y la defensa de la democracia. Olé por los que saben compensar justicia, libertad, razón y democracia. La entrevista giró también en torno a las presiones a las que todo juez se vio sometido.
¿Alguien es tan inocente para dudar de que no existen presiones?,
sentenció el juez. Pero no solo eso, sino que Bermúdez no vaciló en señalar que la posición de muchos juristas no depende únicamente de su trayectoria profesional y habló de presiones políticas y mediáticas desde todos los sectores. Algo para la reflexión sin duda. 

 Y es que el marido de Elisa Beni dejó numerosas perlas para el recuerdo. Con dos me quedo sin duda. Por un lado, su contestación al director de El Mundo, Pedro Jota Ramírez, quien en medio de su habitual conocimiento acerca de todos los temas, acusó al juez de imparcialidad y ayuda a la elaboración del libro de su mujer. Palabras vacías para un hombre que, como él mismo señaló, “no está al nivel de dicha persona” y dio una lección de moralidad cuando defendió la libertad de su esposa. “Machista” es el calificativo exacto que empleó Bermúdez. Un acierto, sin duda, las palabras y la elegancia con la que el juez respondió a las palabras del conservador periodista. Y, en segundo lugar, el tema Bárcenas. El hombre más “popular” de este país, un “ladrón cabrón” para muchos niños (como pudimos ver en el programa El Intermedio de La Sexta) fue objeto de la entrevista a Bermúdez. Porque el propio juez solicitó llevar el caso al considerarlo independiente de la trama Gürtel. No se lo concedieron pero él sigue considerando que se trata de un caso que merece un trato independiente. 
Igual de interesante su opinión sobre la financiación de los partidos políticos. “La financiación ilegal no es delito, pero debería serlo”, recalcaba el juez. Así, la entrevista del domingo nos permitió descubrir a un hombre serio que supo criticarse a sí mismo ante ciertas palabras “irrespetuosas” que empleó en un juicio y que Jordi Évole le mostraba en video. Una persona crítica que en todo momento separa trabajo y persona y así se lo dejó ver al entrevistador desde un principio: “Estás entrevistando al juez Bermúdez, no a Javier Gómez Bermúdez, por lo que soy juez las 24 horas del día”. Comedido pero directo, prudente pero sincero, serio y cortante. Así se presentó un juez que mucho ha trabajado para este país y que trata de salvar continuamente los ataques mediáticos o políticos a los que se ve sometido. 

Una entrevista que ha sido objeto de las páginas de todos los diarios: http://www.elperiodico.com/es/noticias/tele/evole-lidera-con-juez-bermudez-2401321
 A continuación os dejo el programa Salvados del pasado domingo para ver esta gran entrevista


domingo, 14 de abril de 2013

Madrid se tiñe republicana

"España, mañana, será republicana"


Este y otros gritos han despertado a la capital madrileña el día en que se cumplen ochenta y dos años de la proclamación de la II República en España. Dos momentos diferentes pero una misma esperanza: un sistema republicano que traiga libertad, justicia e igualdad. Como se escuchaba entre los manifestantes, no hay dos sin tres y, en momentos de crisis y penurias como el actual, la ilusión por una república fresca y regeneradora se vuelve aún mayor.


El acto reivindicativo comenzaba a las doce y media de la mañana, una hora temprana para los más dormilones pero tardía para los madrugadores. No obstante, no había excusa para perderse un acto que se repite una vez al año y que está lleno de contenido histórico. No se pueden olvidar los años de bienestar, igualdad, valentía y cambios que la II República trajo a nuestro país. Por ello, miles de personas acudían a una manifestación que comenzaba en Cibeles para terminar en la madrileña Puerta del Sol. El mismo escenario que también se teñía de banderas republicanas hace más de ocho décadas.

Madrid amanecía soleada, calurosa y vital; una mañana que invitaba a salir a las calles a disfrutar del clima primaveral. Pero muchos ciudadanos han cambiado su sesión dominical de deporte, paseo o estudio por una manifestación cuyo carácter fundamental es el reivindicativo. No obstante, se podrían separar dos corrientes del acto que ha desfilado por las calles de la capital.

Por un lado, aquellos que siguen la tradición y que, como cada catorce de abril, se reúnen para reivindicar un sistema que, objetivamente, trajo mucho bien a este país (igualdad, educación, bienestar). Se trata de un público mayoritariamente anciano que con su propia experiencia y después de tantos años ven en una república el mejor sistema para vivir. Personas convencidas del beneficio que una república traería a España y que, ilusionados, esperanzados y llenos de energía esperan y luchan por un cambio de rumbo. Algo nada arbitrario y muy reflexivo. Si después de tantos años miles de personas consideran que el sistema actual no alcanza el bienestar republicano, especial atención merecerán sus argumentos y reflexiones. De hecho, es admirable ver a ancianos con una sonrisa y la bandera republicana protegiéndoles un cuerpo que ya no funciona como en su juventud pero que mantiene la misma ilusión y vitalidad por vivir en un sistema republicano.

 Por otro lado, aquellos ciudadanos que acudían a la manifestación por un contexto de crisis económica y descontento generalizado. De hecho, en la manifestación se sacudían pancartas relativas a los recortes sociales o a la ineficiente gestión del gobierno popular. Ciudadanos que reivindican la educación pública y de sanidad o que gritan por el fin de los desahucios han acompañado al grupo anteriormente definido. De hecho, el público que acudía a hoy al centro madrileño ha sido más numeroso y diverso que en ocasiones anteriores y se puede afirmar que la crisis económica y los recortes opresores del pueblo han contribuido a ello. En ese sentido, destacar la presencia de abuelos con nietos que, si bien pueden tener intereses diferentes dadas su situación, acudían al acto reivindicativo a sabiendas de que la República traerá aquello que necesitan. Pero no solo aquello que necesitan, sino aquello que en la "democracia" actual se nos quita y no se nos devuelve.

Un día de reivindicación por un sistema que puede ser muy favorable para España. Pero también un día de celebración, esperanza y optimismo porque cada vez son más personas las que se unen a la oleada republicana y son conscientes de la ilegitimidad, corrupción e inutilidad de la monarquía.

14 F








"ESPAÑA, MAÑA,A SERÁ REPUBLICANA"

"NO HAY DOS SIN TRES"

"JUAN CARLOS ACELERA PORQUE VIENE LA TERCERA"


sábado, 9 de febrero de 2013

El día en que casi lloro

Bárcenas por aquí, Bárcenas por allá...Ha sido el hombre de la semana, la palabra más pronunciada por la ciudadanía en un momento realmente delicado para España. Pero, ¿es realmente consciente la sociedad de lo que se ha desvelado? Porque no son meros papeles con cuentas relativas a la corrupción. Es mucho más que todo ello.
La corrupción siempre ha existido, sigue existiendo y, lamentablemente, seguirá ocurriendo mientras esto siga así. En tiempo difíciles como los que estamos viviendo, este fenómeno tan popular entre la clase política sale a la luz cada día salpicando a presidentes, senadores, parlamentarios, alcaldes o concejales. Sin embargo, no todos los días el presidente del gobierno se ve envuelto en un caso tan vergonzoso e insultante para el pueblo español.
Las pruebas de las irregularidades cometidas en el Partido Popular no son simples papeles. Sino que son las continuas mentiras, incongruencias, contradicciones y sinsentidos a los que nos tienen acostumbrados sus representantes. Y en este caso, no han faltado a sus rasgos más distintivos: la mentira y la evidencia de ella.
Porque el día en el que EL PAÍS publicó los famosos papeles Bárcenas esperé durante todo el día a que el presidente de mi país saliera a comparecer. Ya no era cuestión de lo que dijera, sino de que se mostrara contundente y firme en su verdad. Salvando que su discurso fuera cierto o no, esperaba a un hombre sereno, seguro de sí mismo y rotundo en su declaración. Pero no. Ese día no escuché a Mariano Rajoy, ni al otro, ni al siguiente...Varios días hasta que este señor que se supone es presidente de un país inmerso en una de las crisis más profundas de la historia y en medio de un importante malestar social se dignara a "deleitarnos" con unas palabras. Días, por otro lado, plagados de declaraciones absurdas, evidentes y  faltas de rigor y sustancia por parte de miembros del partido que no saben como sostener su propia mentira. Una ministra que se queda sin palabras cuando en mitad de la rueda de prensa la confirman las declaraciones de un compañero suyo que ha admitido su culpabilidad en la trama. Una ministra que no tuvo palabras mejores que: "Puede que eso sea verdad, pero no todo lo que contienen esos papeles es verdad". Una ministra que reacciona de esa manera está dejando todo bien claro. Ahora bien, yo la preguntaría :  ¿Y qué es verdad en esos papeles?" Porque todo remite a corrupción, fraude y engaños. Nada hay de positivo en ellos y me gustaría que lo aclararan. Mucho me temo que no va a ser así y, de una manera u otra, los culpables se saldrán de rositas.
Pero ahora viene lo mejor. Si me emocioné cuando supe que Mariano iba a tener la molestia en hablar ante las cámaras, casi lloro cuando me dijeron las condiciones: sin posibilidad de preguntas para los periodistas y a través de una pantalla. La verdad que es difícil valorar esta actitud. Yo, después de una semana, sigo sin dar crédito de lo que este hombre ha hecho. Ya no es solo que haya adquirido dinero irregularmente, sino que ha tardado varios en días en comparecer y, cuando lo ha hecho, ha sido durante cinco miserables segundos y a través de una pantalla.
Como españoles debemos sentirnos insultados ante esta falta de respeto y compromiso por parte de un presidente. Porque muchas pueden ser las acusaciones falsas pero ninguna puede ser la falta de compromiso de un presidente con su ciudadanía.
El discurso de Rajoy prefiero ni valorarlo puesto que nada dijo en realidad. Palabras vacías que de nada sirven y que dejan muchas dudas acerca de su persona y de su capacitación para el cargo tan importante que ocupa. Vimos a un hombre nervioso, pasivo, distante y envuelto en una falta de confianza y credibilidad mur preocupantes. Una vergüenza que el presidente de un gobierno de esa imagen y no sea capaz de enfrentarse a las preguntas de los periodistas.
Yo seguiré sin dar crédito a estos graves acontecimientos, esperando dimisiones y sentencias pero, en unas semanas, todo se habrá olvidado y don Mariano seguirá privatizando.

martes, 15 de enero de 2013

Esperanza engañosa

Muchos criticaron a los que afirmábamos que la dimisión de Esperanza Aguirre como presidenta de la Comunidad de Madrid no era más que un hecho premeditado y muy bien calculado. Nos tachaban de falta de sensibilidad ya que la "pobre" mujer tenía problemas de salud. Se marchó de su cargo, faltando así al respeto a todos los ciudadanos, ya fueran votantes o no. Y ayer la esperada noticia: Esperanza ha conseguido un empleo en una empresa PRIVADA Y CATALANA. Estupefacta me quedé, no solo porque ha engañado a todo el pueblo madrileño, sino porque me sorprende la rapidez con la que encuentra un empleo en estos difíciles tiempos y más en una empresa catalana. Y sí, me llama mucho la atención porque tan solo hace unos meses que la gran política, con su sonrisa imborrable irradiando despotismo donde quiera que va, animó a los ciudadanos a no adquirir productos catalanes. Algo no encaja en todo esto...
Algo tengo claro: Esperanza sabía la que se avecinaba en su comunidad con la privatización de la sanidad y eligió el momento oportuno para irse. No estaría en una empresa privada si de verdad necesitara alejarse del trabajo como afirmó. Y tódavía tenemos que oírla afirmando su sorpresa por la crítica de la ciudadanía ante esta decisión. Yo lo veo muy claro: has engañado y te has marchado a otro trabajo. Nadie te echará de menos, pero podrías llevarte contigo a todo tu séquito de charlatanes que, como el nuevo presidente de la Comunidad de Madrid, defienden el aprovechamiento de un cargo público para obtener beneficios. Realmente lamentable.

Pero ya no me sorprende nada en este país. Que un ministro es destituído de su cargo, no pasa nada que al día siguiente estará ocupando otro puesto (con su sueldo millonario y sus correspondientes "negocietes" claro está). Que el alcalde deja su puesto, no pasa nada que Botella irá al rescate para estropearlo todo más y reírse de los madrileños con numerosas contradicciones, risas cínicas y falta de explicaciones. Y para que hablar de los robos que durante años se llevan cometiendo en este país. La corrupción está saliendo a la luz y salpicando a numerosos cargos públicos. Pero estoy segura que entre todos encontrarán una forma de volver a enterrar sus trapicheos. Porque ellos se lo guisan y ellos se lo comen. Todo queda en casa, como dicen, y prueba de ello son las numerosas relaciones sentimentales, personales o profesionales existentes entre los imputados, culpables o responsables de las atrocidades que se han cometido y se siguen cometiendo en España.

Algo se está haciendo mal y situaciones como éstas no se pueden consentir.

sábado, 5 de enero de 2013

Y dreamed a dream.

I dreamed a dream...
Yo tuve un sueño...Un sueño en el que los árboles se caían, los océanos se secaban y la lluvia no mojaba. Un sueño en el que los pájaros andaban, las personas volaban y la felicidad se manifestaba en lágrimas.
Mi silencio no era sino el mayor de los gritos jamás oído cuyo eco no se propagaba, sino que se concentraba y se guardaba en un botella. Pero el mensaje no permanecía en la botella. Viajaba y se difundía por el frío aire del desierto y sus turbulentas aguas. Aguas que me atrapaban y me arrastraban a una selva llena edificios. Y entraba en uno de ellos, corría y corría por unas escaleras sin peldaños. Me precipitaba al abismo y caía en un avión. Un avión que descendía, en caída libre, hacia el suelo blando y resbaladizo. Y, de repente, saltaba y volaba. Volaba entre las nubes que me envolvían en su áspera calidez. Me agarraban, me tenían prisionera. Y ahí estaba yo, entre un mar de nubes, sin poder moverme y conteniendo la respiración cuando te ví. Te acercabas, me besabas y me susurrabas: " ¿No es esto lo que siempre has deseado? Tú, y tu manía de estar en las nubes y ver la vida del color de rosas. Ahora es tu oportunidad de escapar de estas nubes que te atrapan y no te dejan ver la realidad. Ven conmigo, te enseñaré el mundo, mi mundo". Me tendió la mano y, cuando se la iba a dar, desperté.
Seguiré en las nubes. Qué le vamos a hacer.